RUPPERT LEROY
La granja familiar de Ruppert Leroy se extiende sobre 4 hectáreas en las afueras del pueblo de Essoyes, en l'Aube, en el límite de la appellation Champagne, justo en la famosa Côte des Bar, pero a pocos kilómetros de la Côte d’Or en Borgoña. Es aquí donde una nueva generación de viticultores está floreciendo, sin las limitaciones impuestas por la sabiduría convencional de la región. Si hay algún lugar que se adapte mejor a la filosofía de "Borgoña con burbujas" de los mejores productores de la región, es aquí.
Este espíritu pionero lo encarna Gerard Ruppert y su hija Bénédicte Leroy. Para ellos, el viñedo es un ecosistema vivo y complejo, y su filosofía de trabajo busca recrear ese equilibrio, basándose en la observación, a menudo empírica, a través de prueba y error, siempre cuestionándose, pero con mucho amor y pasión por lo que hacen. El resultado de esta intuición, experimentación, además de un lugar privilegiado y de un trabajo bien hecho, son sus champagnes sorprendentes.
La historia se remonta a los años 70, cuando Gerard Ruppert, doctor en Filosofía, regresó a su tierra para plantar media hectárea de viñedos en agricultura orgánica, en una época en la que las viñas en Champagne eran tratadas con fuertes dosis de químicos y la calidad de la fruta no era una prioridad. Comenzó vendiendo sus uvas a las cooperativas locales y, al llegar su retiro en 2010, decidió ceder su propiedad a su hija Bénédicte, quien vio en ello una oportunidad para vinificar por sí misma y dedicarse por completo al viñedo.
Aunque Bénédicte era nueva en la producción de champagne, la calidad de la fruta proveniente de los viñedos de su padre era impecable, resultado de décadas de agricultura orgánica y de un enfoque en mantener el suelo y las viñas sanos de forma natural.
Cuatro años después, decidió dar un paso más y convertir los viñedos en biodinámicos, inspirada por una visita a uno de los pioneros del movimiento del vino natural en Francia, Pierre Paillard, un contemporáneo de Jules Chauvet, considerado el padre del vino natural en el Beaujolais. Este encuentro la llevó a otra leyenda, Pierre Overnoy, de Jura, quien le dedicó tiempo generosamente y compartió sus enfoques, ayudándola a comprender cómo capturar la magia del terroir en la botella. Entendió que esto implicaba todo, desde la duración de la crianza y la minimización del uso de azufre, hasta ideas radicales propias.
Bénédicte decidió construir una nueva bodega de ladrillo, con techos de madera y aislamiento de paja, para que los vinos puedan respirar tanto como sea posible durante el envejecimiento. Utilizan un tractor muy liviano para transportar las uvas a la bodega, de manera que lleguen al prensado en perfectas condiciones, evitando la oxidación previa a la fermentación y reduciendo la necesidad de azufre.
Gracias a estos años de trabajo, sumados al talento y pasión que ha puesto Bénédicte, no es sorprendente que sus vinos sean ya considerados grandes, primero en su calidad en sí mismos y, en segundo lugar, como excelentes champagnes.
Para maximizar la expresión del terroir, elaboran una cuvée por año y de cada parcela de forma individual. Trabajan de la manera más natural posible, utilizando las levaduras indígenas de las uvas, sin clarificación ni filtrado. La transición a temperaturas frías se produce de forma natural, aprovechando las heladas de invierno. Todo esto, en búsqueda de respetar y preservar la esencia auténtica de sus vinos.
“The quality of our wine comes directly from the quality of the grapes we have.”
-
Blended de 70% Chardonnay y 30% Pinot Noir 2021. Esta es una cuvée efímera que resulta de las parcelas del domaine y de las uvas que vecinos que cultivan en orgánico generosamente donaron debido a la devastadora helada de este año. Elaborada en Demi-muids y barricas. Brut-Nature, Fermentación malo-láctica natural, sin sulfitos añadidos, no filtrado ni clarificado, no dossage.
-
Uva 100% Pinot Noir de las parcelas “Les cognaux”, es un vino rosado “rosé de saignée” Brut Nature de maceración semi-carbónica de 4 días. Fermentación alcohólica y crianza en tanque sobre sus lías durante 9 meses. Fermentación malo-láctica natural, sin sulfitos añadidos, no filtrado ni clarificado, no dossage. Añejamiento en botella de 18-20 meses.
-
Ensamble de Chardonnay y Pinot Noir de todas las parcelas. Cuvée reserva perpetua (solera) iniciada en 2011… Brut nature. Crianza en tanques y barricas. Añejamiento en botella de 18 a 20 meses sobre sus lías antes de reposar en botella para armonizar la cuvée. Fermentación espontánea, sin sulfitos añadidos, no filtrado ni clarificado, no dossage.
-
Uva 100% Pinot Noir de las parcelas “Les cognaux” de suelo calizo y de arcilla. Brut Nature. Fermentación acohólica espontánea y crianza sobre sus lías en barricas y “demi-muids” (barricas francesa de roble de 600lt) durante 9 meses. Fermentación malo-láctica natural y añejamiento en botella durante 10 a 12 meses. Sin sulfitos añadidos, no filtrado ni clarificado, no dossage.
-
Pinot Noir y Chardonnay en suelos de caliza con un poco de arcilla roja y con grava en la superficie (de ahí el nombre). Fosse-Grely, es una la parcela más grande del domaine, plantada por el padre en 1980 en selección massale, en lo mas bajo de la colina de Essoyes. Crianza sobre lías en barricas grandes de 500lt y crianza de 18 meses mas en botellas sur lattes. Sin SO2 añadidos. Sin dossage.
-
Pinot Noir de una parcela en selección massale, extensión del viñedo Fosse-Grely. 9 meses de crianza sobre lías en barricas de 220 y 500 lt. Crianza de 18 meses sur lattes, embotellado sin dossage final.
-
100% Chardonnay en suelos de caliza blanca y un poco de arcilla, de una de sus más queridas parcelas. Fermentación y maduración en barricas sobre lías y demi-muids por 9 meses. 18-20 meses de crianza en botella sur lattes.
-
Pinot Noir de la parcela Les Cognaux. Fermentación en barricas durante 5 días en maceración carbónica. Se prensa y madura en barricas sobre sus lías por 9 meses. Crianza en barricas sur lattes.